Recientemente, Allianz Research ha emitido su informe mundial, analizando los acontecimientos que han marcado la evolución de la industria de los seguros y la economía global durante el pasado año, y ofreciendo su pronóstico para este 2021.
En este artículo, compartimos contigo las principales conclusiones.
2020 podría haber sido peor
La pandemia de la COVID-19 y las medidas adoptadas para hacerle frente dieron lugar a la peor recesión económica mundial desde la II Guerra Mundial. Evidentemente, la industria de los seguros se vio afectada por este fenómeno.
Sin embargo, el análisis de la facturación de las primas emitidas pone de manifiesto que el retroceso acontecido fue, en realidad, menor que el estimado en primera instancia.
Las primas brutas mundiales, tanto en vida -excluido salud- como en no vida -incendio, accidentes y riesgos diversos- se contrajeron en un -2,1%.
Esto supuso pérdidas valoradas en 80.000 millones, y un cierre anual de 3.730.000 millones de euros. Se trata de una contracción del mercado, equivalente al doble de la acontecida durante la crisis financiera de 2009.
No obstante, las primeras estimaciones fijaban una caída cercana al -4%, la cual no tuvo lugar, gracias a un excelente comportamiento de las primas de incendio, accidentes y riesgos. Estas crecieron un 1,1%, al contrario que las primas de seguro de vida, que sí evolucionaron según lo previsto, con una caída del -4,1%.
La digitalización como factor de resiliencia
De acuerdo con Allianz Research, gran parte de los negocios y empresas han logrado mantener a flote su actividad, gracias a un rápido proceso de transformación digital de sus ventas y procesos.
Las restricciones a la movilidad y el contacto interpersonal fueron superadas, mediante el despliegue de tecnología basada en Internet.
El nivel de éxito en la gestión de la pandemia afectó al seguro de vida
Por otro lado, el informe Allianz Research también señala las grandes diferencias que se pueden apreciar en el rendimiento del seguro de vida, dependiendo de los países analizados.
Por un lado, el éxito en el control de la pandemia parece un factor influyente. Así lo refleja la comparativa entre China -con un crecimiento del negocio en un 4,2%- y Estados Unidos -con una contracción del -2,5%-, o Asia -con un crecimiento del 2,9%- y Europa Occidental con una caída del -5,1%-.
Incluso dentro de las regiones, es posible apreciar diferencias sustanciales, como es el caso de Alemania -que logró mantener un ligero crecimiento-, frente a Francia, España y Suiza -países que redujeron sus ingresos por primas en dos dígitos-.
Los bajos tipos de interés lastran el negocio vida durante toda la década
A pesar de las pérdidas para el sector, el año 2020 fue en realidad la conclusión de una década modesta, especialmente para el seguro de vida.
Las primas de vida apenas crecieron un 2,4% en diez años, lo que supone la mitad que la década anterior.
El principal factor limitante son las reducidas tasas de interés, que han caracterizado las políticas económicas de la mayoría de los bancos centrales, en las principales economías del mundo.
Ni Europa Occidental, ni los Estados Unidos -los dos principales mercados del seguro de vida- lograron crecer significativamente. De hecho, el viejo continente perdió cuota de mercado, al pasar del 40% antes de la crisis financiera del 2009, al 30% a nivel mundial.
Por el contrario, el sector de no vida sí logró crecer a un ritmo del 4,4% anual, similar al de comienzos de siglo.
Estados Unidos como principal motor de crecimiento mundial en 2021
Todo apunta a que China será sustituida por los Estados Unidos, como país impulsor del PIB mundial.
Se espera que la economía norteamericana sea responsable de la cuarta parte del crecimiento esperado, y que se estima en 5,1% en 2021.
Los factores determinantes de la velocidad de recuperación de cada país podrían resumirse en:
- El ritmo de vacunación.
- Los paquetes de estímulo económico.
- La confianza de los consumidores en el progreso de la economía interna.
En el caso de los Estados Unidos, los diferentes paquetes de estímulo aprobados tanto por la anterior Administración, como por la actual deberían contribuir a impulsar la demanda interna.
Por otro lado, la evolución positiva de los precios de la vivienda y la eficaz campaña de vacunación están contribuyendo a reforzar la confianza del consumidor.
Finalmente, no hay que olvidar el programa de inversión en infraestructura de transporte, así como infraestructura verde y digital.
En términos generales, se espera que la economía de los Estados Unidos crezca un 5,3% en 2021, y un 3,8% en 2022.
En lo que se refiere a Europa, su recuperación parece depender de la demanda en China y los Estados Unidos. Se espera un crecimiento del 4% anual, tanto durante el presente año, como en 2022.
Finalmente, China podría crecer a un ritmo del 8,2% en 2021, y del 5,4% en 2022. No obstante, aún tendrá importantes asignaturas pendientes, como la burbuja de precios en los mercados inmobiliarios y de capitales.
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La inflación como lastre para el sector de los seguros
A pesar de la previsible bonanza económica, los seguros tendrán que hacer frente a las crecientes presiones inflacionarias, máxime después de las restricciones ocasionadas por la COVID-19.
Concretamente, los costes en las cadenas de suministro, el precio del petróleo y el precio en el sector servicios seguirán progresando al alza, y empujando a la inflación.
El sector de los seguros es especialmente sensible desde múltiples ángulos.
Para empezar, su rentabilidad puede verse mermada debido al incremento de los costos en el canal de reclamaciones.
El segmento de incendio, accidentes y riesgos es el más expuesto, debido a los largos periodos de liquidación, y el consiguiente aumento de las reservas para pérdidas.
Los seguros de vida también pueden verse afectados por incrementos repentinos de la inflación, la cual erosiona la propuesta de valor de los beneficios fijos.
El incremento de los tipos de interés puede contribuir a aumentar la demanda en productos de ahorro alternativos, como los depósitos bancarios, que compiten directamente con los seguros de ahorro.
En este entorno, según Allianz Research las aseguradoras podrían protegerse invirtiendo en activos, cuyo beneficio está vinculado al aumento de la inflación.
Perspectivas de crecimiento de las primas de seguro
Finalmente, y a pesar de los desafíos, el informe de Allianz Research augura que las primas globales se incrementarán en un 5,1% a lo largo de 2021, con Estados Unidos (+5,3%) y China (+13,4%), como principales motores de crecimiento.
No obstante, esta recuperación podría tener lugar de manera muy desigual.
El pronóstico en Asia, con la excepción de Japón, es muy favorable, pero Europa Occidental podría acusar los retrasos en las campañas de vacunación. Así, se espera que los seguros en el viejo continente crezcan a un ritmo del 1,2% en el presente año, y sea necesario esperar a 2023, para recuperar los niveles de primas previos a la crisis.
