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2021: Año de récord para el autoconsumo fotovoltaico

fotovoltaico autoconsumo

De acuerdo con los datos de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), patronal que representa a más de 400 empresas pertenecientes al sector de la energía fotovoltaica, la potencia para autoconsumo instalada en 2020 alcanzó los 596 megavatios (MW).

A pesar de las restricciones a la actividad económica, ocasionadas por la pandemia, el sector se mantuvo al alza, gracias al empuje de los hogares. De hecho, el 19% de la potencia instalada correspondió al ámbito doméstico.

Una vez superada la primera mitad del año, 2021 se perfila como un ejercicio de cifras récord.

Potencia instalada y objetivos de crecimiento

Según las estadísticas recogidas por la UNEF, la potencia de autoconsumo instalada anualmente en España ha crecido exponencialmente a lo largo del último lustro.

En el año 2014 se instalaron 22 MW; mientras que el pasado 2019 marcó el récord anual con 596 MW instalados.

El presente ejercicio ya ha superado los 714 MW instalados para el autoconsumo, de un total de 12.555 de potencia fotovoltaica acumulada.

El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) prevé una inversión de 28.000 millones de euros en la energía fotovoltaica en su conjunto, durante el periodo 2021-2030.

El objetivo es alcanzar una potencia acumulada de 28.000 MW, tras instalar un total de 3 GW anuales.

Principales factores de crecimiento

De enero a julio, y de acuerdo con las estadísticas de la Red Eléctrica Española (REE), se ha introducido un total de 1.245 MW de potencia fotovoltaica en el sistema eléctrico nacional.

Como hemos señalado al principio, casi la mitad de esta potencia se ha destinado al autoconsumo.

Ayudas públicas

A mediados del verano, el Gobierno ha aprobado un paquete de ayudas por valor de 1.320 millones de euros, destinado al impulso de las energías renovables. Concretamente, la gran beneficiada es la energía solar, que contará con hasta 900 millones de euros.

En principio, se aprobará una línea de ayudas para particulares, autónomos y administraciones públicas, por valor de 450 millones. Dicho importe podrá duplicarse en función de la demanda.

A su vez, las ayudas se dividen en seis grandes áreas:

  • Sector servicios, que contará con 120 millones de euros.
  • Industria, que dispondrá de 175 millones de euros.
  • Sector residencial, público y tercer sector, dotados conjuntamente con 215 millones de euros.
  • Además, el sector residencial contará con una partida de 5 millones de euros, para la incorporación de autoconsumo.

Las estimaciones de la UNEF apuntan un desarrollo superior a los 3 gigavatios (GW) de autoconsumo, gracias a 180.000 nuevas instalaciones.

Reducción de costes

La caída de los costes de producción ha contribuido a animar a los inversores. En la década de los 60, el coste de producción mundial por cada vatio pico (Wp) se situaba alrededor de los 82 euros. En la actualidad, esta cifra ha caído por debajo de los 2 euros.

De hecho, el informe publicado por el Fraunhofer Institute for Solar Energy Systems, estima que los costes del sector han caído un 95%, tan solo en la última década.

La UNEF ha señalado que el coste de la inversión de una instalación industrial de 50 kW se amortiza en un plazo de cinco años, por debajo de otras energías renovables.

Apuesta de la gran empresa por el autoconsumo

Por último, hay que destacar que, además de los particulares, las empresas están haciendo una gran apuesta por la independencia energética.

El modelo de contratación más extendido es el de la PPA on-site. Este modelo consiste en el despliegue de paneles fotovoltaicos en los locales o instalaciones del cliente, los cuales se conectan a su red interior.

El desarrollador renovable asume el diseño, inversión, montaje, operación y mantenimiento de la instalación.

El contrato tiene una vigencia de entre 8 y 15 años. Durante ese periodo, el desarrollador ofrece al cliente la energía generada a un precio más competitivo, que la que obtendría de la red general. Una vez vencido el contrato, la instalación pasa a ser propiedad del cliente y la producción de energía se vuelve gratuita.

Las principales empresas energéticas del país están llevando a cabo enormes proyectos con numerosas empresas interesadas en el autoconsumo. Tal es el caso de los contratos de Endesa con Bridgestone, Kronospan y Protur Hotels.

Iberdrola tampoco se ha quedado atrás, con sus acuerdos con SABIC, Mapfre, Juver, Makro, Wallbox o Marqués de Riscal. Por su parte, Naturgy ha cerrado un contrato con Jevaso; y EDP se ocupará del suministro de Burger King.

Sin duda, el sector de la gran empresa ya se ha posicionado como uno de los grandes impulsores de la energía fotovoltaica, para autoconsumo. La reactivación económica, una vez superada la crisis del coronavirus, debería permitir que estos proyectos se multipliquen durante los próximos años.

Actualidad Solunion