La industria agroalimentaria es una cadena de valor altamente integrada, que engloba desde la agricultura hasta el procesamiento de alimentos, incluidas las bebidas alcohólicas y no alcohólicas. Las ventas mundiales del sector agroalimentario en 2020 ascendieron a 6,6 billones de dólares, un aumento del +0,5% frente a 2019, con las exportaciones de los países emergentes en aumento, que representan más de un tercio del total mundial. La fabricación de productos agroalimentarios ocupará un lugar importante en la agenda de las próximas décadas, ya que el desafío sigue siendo satisfacer la demanda mundial, además de proveer al poderoso sector minorista (de alimentos).

Históricamente, la industria agroalimentaria apenas ha padecido la incertidumbre, gracias al consumo constante impulsado por el aumento de la población mundial y la renta disponible. Además, después de dos años de escasez, la agricultura ha comenzado a beneficiarse de la recuperación de los precios de los pro- ductos alimenticios, especialmente los cereales, que registraron un aumento del +19% intermensual a fines de diciembre de 2020. Sin embargo, las nuevas tendencias están cambiando el funcionamiento del sector agroalimentario y el lugar que ocupan las prioridades estratégicas. En todo el segmento agrícola, las aplicaciones de tecnología digital ayudan a abordar los fallos del mercado y facilitan la integración de los agricultores en las cadenas de valor al reducir los costes de información y operativos. Las preferencias de los consumidores también se están moviendo hacia productos más locales, lo que ejerce presión sobre los fabricantes de alimentos, ya que necesitan invertir en nuevas líneas de productos.

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