ESG son las siglas de Environmental, Social y Governance (ambiental, social y gobernanza). Estos criterios se han convertido en un marco clave para medir el impacto de una empresa más allá de lo financiero.
La presión regulatoria crece y los mercados valoran cada vez más los factores ESG. Por eso, integrarlos en la gestión es un paso imprescindible hacia la sostenibilidad empresarial.
Adoptar una estrategia ESG ayuda a identificar riesgos, mejora la reputación, aumenta la competitividad y facilita el acceso a capital.
¿Qué son los criterios ESG?
Los criterios ESG (ambientales, sociales y de gobernanza) son una referencia esencial para evaluar el comportamiento y la sostenibilidad de las empresas.
Ya no se trata solo de cumplir con la ley o mejorar la imagen corporativa: las compañías que integran estos principios demuestran ser más resilientes, transparentes y atractivas para inversores, socios y clientes. Permiten medir el impacto global de una organización —económico, ambiental y social— y orientan las decisiones hacia un crecimiento sostenible a largo plazo.
Lejos de ser una etiqueta, los criterios ESG son también una herramienta de diagnóstico que ayuda a entender la situación real de una empresa, definir prioridades de mejora y prepararse para cumplir con la normativa y las expectativas del mercado.
Ambiental (E): gestión de recursos, emisiones y eficiencia
Social (S): personas, condiciones laborales y comunidad
Gobernanza (G): ética, transparencia y buen gobierno corporativo
Autoevaluación ESG: un diagnóstico inicial para tu empresa
Dar el primer paso en sostenibilidad no significa someterse a un rating externo. La autoevaluación ESG es un ejercicio interno y confidencial que te ayuda a interpretar dónde está tu empresa en términos de sostenibilidad.
Diferencia entre autoevaluación y rating
- Rating ESG: evaluación externa, comparativa y con nota pública.
- Autoevaluación ESG: diagnóstico interno y privado para detectar fortalezas y debilidades.
¿Cómo funciona la autoevaluación ESG?
Mediante cuestionarios simples recopilas información sobre políticas y prácticas en los tres ámbitos ESG. El informe resultante permite:
- Detectar áreas de mejora.
- Definir prioridades de acción.
- Preparar a tu empresa para la normativa ESG para empresas y para las demandas de inversores.
Plataformas como Estratify, de Solunion, incluyen un módulo de autoevaluación que facilita este proceso, con informes claros y aplicables.
Dar el primer paso en sostenibilidad no significa enfrentarte de inmediato a auditorías complejas ni a comparaciones con otras compañías.
La autoevaluación ESG es una herramienta de diagnóstico inicial que te permite conocer tu situación real y marcar un plan de acción para mejorar.
Optimización de condiciones de pago
Identificar riesgos en tu cartera de clientes
No siempre los mayores riesgos provienen de nuevos clientes. A menudo pueden aparecer en tu cartera habitual o en aquellos con los que tienes más confianza.
Con Estratify puedes detectar cambios en la situación financiera de tus clientes y proveedores actuales, anticipando señales de alerta y dándote margen de reacción.
Prospección de nuevos mercados
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