El vínculo inversor entre España e Italia se ha consolidado en los últimos años, con una evolución constante que refleja la confianza de las empresas españolas en el mercado italiano.
Según el “Barómetro sobre clima y perspectivas de la inversión española en Italia”, elaborado por ICEX España Exportación e Inversiones en colaboración con la Oficina Económica y Comercial de España en Roma, casi 9 de cada 10 empresas consideran positiva o muy positiva su experiencia inversora en Italia.
La presencia empresarial española se ha diversificado en sectores clave como infraestructuras, energía, ingeniería, alimentación, TIC y servicios profesionales. Además, el marco regulatorio y el tamaño del mercado italiano siguen siendo factores determinantes para muchas compañías que apuestan por ampliar su implantación en el país.
Empresas optimistas: el 71 % prevé aumentar su inversión en Italia
El 71% de las empresas españolas prevé aumentar su inversión en Italia durante los próximos tres años, según el mismo barómetro. Esta tendencia revela un alto grado de confianza en el entorno económico italiano, a pesar de las incertidumbres macroeconómicas globales.
Las expectativas para 2025 apuntan a un refuerzo de la actividad en sectores como energías renovables, digitalización, servicios tecnológicos, movilidad eléctrica y economía circular. Estos ámbitos ofrecen oportunidades claras de colaboración entre empresas españolas e italianas, especialmente en el marco de los fondos europeos vinculados al Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia de Italia.
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Además, el 67% de las empresas cree que su facturación en Italia crecerá a corto o medio plazo. Esto refuerza la percepción de Italia como un destino estratégico para seguir desarrollando proyectos, captar clientes y expandir operaciones.
Factores clave que impulsan la inversión española en Italia
Italia sigue siendo uno de los destinos más relevantes para las empresas españolas que buscan crecer en el mercado europeo. El citado “Barómetro sobre clima y perspectivas de la inversión española en Italia” identifica varios elementos que explican este atractivo:
- Acceso al mercado europeo: Italia actúa como plataforma de entrada o consolidación para muchas empresas con ambición internacional. Su integración en la Unión Europea, su posición geográfica y su red logística facilitan la conexión con otros países clave del continente.
- Estabilidad institucional: la seguridad jurídica, la pertenencia al euro y la continuidad de políticas europeas ofrecen un entorno relativamente estable para invertir, especialmente frente a otros destinos más volátiles o de economías emergentes.
- Tamaño del mercado y afinidad cultural: Italia es la tercera economía de la eurozona. Su mercado interior ofrece una base de consumidores amplia y diversa. Además, la afinidad cultural y los vínculos históricos entre ambos países facilitan las relaciones comerciales y operativas.
Obstáculos a tener en cuenta para la inversión española en Italia
Aunque el mercado italiano ofrece múltiples oportunidades, las empresas españolas también han identificado ciertos retos que conviene gestionar con anticipación y apoyo experto:
- Complejidad burocrática: la tramitación administrativa sigue siendo una de las principales quejas. Los procedimientos pueden resultar lentos, con requisitos variados según regiones o sectores, lo que obliga a destinar recursos adicionales a la gestión local.
- Presión fiscal: la fiscalidad italiana es percibida como elevada en comparación con otros países europeos, lo que puede impactar en los márgenes.
- Barreras normativas sectoriales: algunas regulaciones específicas —como las del sector energético, sanitario o tecnológico— presentan obstáculos adicionales para empresas extranjeras, sobre todo en lo relativo a licencias, homologaciones o cumplimiento legal.
¿Cómo valoran las empresas españolas el entorno italiano?
En lo que concierne a las condiciones generales para operar en el país, la percepción de las empresas españolas es en su mayoría positiva, aunque existen diferencias según el área analizada.
Infraestructuras
Las infraestructuras italianas reciben una buena puntuación, especialmente en lo referente a conectividad logística, red de transporte y acceso a puertos y aeropuertos estratégicos. Las empresas valoran su adecuación para operaciones de escala europea.
Talento
El acceso a profesionales cualificados es aceptable, aunque algunas compañías señalan dificultades para encontrar determinados perfiles técnicos o especializados, especialmente en sectores con alta demanda de innovación.
Entorno digital
La digitalización del tejido productivo italiano aún muestra margen de mejora. Las empresas españolas perciben un ritmo desigual según regiones y sectores. No obstante, también lo consideran una oportunidad para aportar soluciones tecnológicas y acelerar procesos.
Condiciones financieras
Las condiciones de acceso a financiación son razonables, aunque el entorno bancario presenta ciertas rigideces para start-ups y pymes. Aun así, el desarrollo de instrumentos de capital riesgo y financiación alternativa avanza de forma progresiva.
Prioridades de inversión española en Italia: foco sectorial
Los sectores en los que las empresas españolas concentran sus esfuerzos de inversión en Italia coinciden con áreas estratégicas para el desarrollo económico europeo y con el posicionamiento competitivo de muchas compañías españolas:
- Industria: el sector industrial, especialmente el vinculado a la automoción, maquinaria, química y componentes, sigue siendo uno de los pilares de la presencia española. Las sinergias productivas y la complementariedad de capacidades fortalecen esta apuesta.
- Energía: las energías renovables y las soluciones de eficiencia energética son una prioridad común en ambos países. Italia representa un mercado clave para las empresas españolas del sector, que encuentran oportunidades en proyectos públicos y privados.
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- Tecnologías digitales: las soluciones tecnológicas y los servicios digitales ganan peso. La transformación digital en Italia genera demanda de plataformas, ciberseguridad, automatización y software especializado, campos en los que muchas empresas españolas tienen experiencia exportable.
- Alimentación y distribución: este sector, tradicionalmente fuerte en ambos países, ofrece oportunidades en nichos como los productos gourmet, ecológicos o con valor añadido. La distribución especializada y la hostelería también actúan como canal de entrada para muchas marcas.
Perspectivas de la inversión española en Italia para 2025
Por último, cabe señalar que el panorama de cara al ejercicio 2025 es bastante optimista. La mayoría de las empresas prevé reforzar su presencia, aumentar plantilla y ampliar su cobertura geográfica.
- Crecimiento de la inversión: el 71 % de las compañías españolas prevé incrementar su inversión en Italia durante 2025. Este dato consolida una tendencia al alza iniciada en los últimos años y refleja la confianza en la evolución económica del país.
- Aumento de la contratación: un 47% de las empresas encuestadas tiene previsto aumentar su plantilla en el mercado italiano. Las contrataciones se centrarán en perfiles técnicos, comerciales y especializados, clave para impulsar el crecimiento operativo.
- Expansión geográfica: más allá de las grandes ciudades como Milán, Roma o Turín, las empresas están explorando nuevas regiones con potencial de desarrollo, como Emilia-Romaña, Piamonte o la zona del Véneto. Esta diversificación responde a criterios logísticos, fiscales y de acceso a talento.
En conclusión, Italia sigue siendo un excelente destino estratégico para la inversión española, gracias a las oportunidades sectoriales, la afinidad cultural y la posición geográfica del país.